.
"Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía. Lo-li-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos desde el borde del paladar para apoyarse, en el tercero, en el borde de los dientes. Lo.Li.Ta.
Era Lo, sencillamente Lo, por la mañana, un metro cuarenta y ocho de estatura con pies descalzos. Era Lola con pantalones. Era Dolly en la escuela. Era Dolores cuando firmaba. Pero en mis brazos era siempre Lolita".
.
Stanley Kubrick - Lolita - Sue Lyon- 1962
"Entre los límites de los nueve y los catorce años, surgen doncellas que revelan a ciertos viajeros embrujados, dos o más veces mayores que ellas, su verdadera naturaleza, no humana sino nínfica (o sea demoníaca); propongo llamar «nínfulas» a esas criaturas escogidas...
Si pedimos a un hombre normal que elija la niña más bonita en una fotografía de un grupo de colegialas o girl-scouts, no siempre señalará a la nínfula.
Hay que ser artista y loco, un ser infinitamente melancólico, con una burbuja de ardiente veneno en las entrañas y una llama de suprema voluptuosidad siempre encendida en su sutil espinazo (¡oh, cómo tiene uno que rebajarse y esconderse!), para reconocer de inmediato, por signos inefables -el diseño ligeramente felino de un pómulo, la delicadeza de un miembro aterciopelado y otros indicios que la desesperación, la vergüenza y las lágrimas de ternura me prohiben enumerar-, al pequeño demonio mortífero entre el común de las niñas."
Vladimir Nabokov, Lolita, 1955
Stanley Kubrick - Lolita - James Mason y Sue Lyon
•Nos enamoramos simultáneamente, de una manera frenética, impúdica, agonizante.
•Nos queríamos con amor prematuro, con la violencia que a menudo destruye vidas adultas.
•En este mundo hecho de hierro forjado, de causas y efectos entrecruzados, ¿podría ocurrir que el oculto latido que le robé no afectara su futuro? Yo la había poseído, y ella nunca lo supo.
•Ella llevaba una camisa a cuadros, blue jeans, zapatillas de goma. Cada movimiento que hacía en las salpicaduras de sol punzaba la cuerda más secreta y sensible de mi cuerpo abyecto.
.¡Oh, si fuera yo una escritora que pudiera hacerla posar bajo una luz desnuda!
•Y allí está ella, perdida entre todos, royendo un lápiz, detestada por los maestros, con los ojos de todos los muchachos fijos en su pelo y en su cuello, mi Lolita.
•Ya todo estaba listo. Los nervios del placer estaban al descubierto. El menor placer bastaría para poner en libertad todo el paraíso.
•Que vuelva pronto, rogué, dirigiéndome a un Dios prestado.
•Ningún hombre logra jamás el crimen perfecto; el azar, sin embargo, puede lograrlo.
•Imagíname: no puedo existir si no me imaginas.
•…aplicar mis labios voraces a su corazón desconocido.
•¿Cuánto pides por tus pensamientos?
•Era amor a primera vista, a última vista, a cualquier vista.
•La miré y la miré, y supe con tanta certeza como que me he de morir, que la quería más que a nada imaginado o visto en la tierra, más que a nada anhelado en este mundo.
•Bueno, algún día, si quieres venirte a vivir conmigo… Crearé un nuevo Dios y le agradeceré con gritos desgarradores si me das una esperanza microscópica.
Lolita 1955
Lolita - 13 de junio de 1962
No hay comentarios:
Publicar un comentario